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La Sociedad Estadounidense de Cirugía Bariátrica y Metabólica y la Federación Internacional para la Cirugía de la Obesidad y los Trastornos Metabólicos han emitido un nuevo conjunto de pautas relacionadas con la elegibilidad del paciente para la cirugía de pérdida de peso, además de varias recomendaciones. Las actualizaciones llegan después de 30 años, actualizando las pautas de los NIH de 1991 para la cirugía bariátrica.
Las actualizaciones clave incluyen:
Una recomendación para cirugía metabólica y bariátrica para individuos con un IMC de 35 kg/m 2 y superior, sin importar la presencia, ausencia o gravedad de comorbilidades.
Las personas con enfermedad metabólica y un IMC de 30 a 34,9 kg/m 2 deben ser consideradas para cirugía metabólica y bariátrica.
Para las personas de la población asiática, los umbrales del IMC deben ajustarse de modo que un IMC de 25 kg/m 2 y superior sugiera obesidad clínica. Además, a las personas con un IMC de 27,5 kg/m 2 o superior se les debe ofrecer cirugía.
Los resultados de la cirugía metabólica y bariátrica son consistentemente seguros y efectivos a largo plazo.
Los niños y adolescentes deben ser considerados para cirugía metabólica y bariátrica, de manera apropiada.
“Desde que los NIH publicaron su declaración sobre la cirugía gastrointestinal para la obesidad severa en 1991, la comprensión de la obesidad y la cirugía bariátrica y metabólica ha crecido significativamente en base a una gran cantidad de experiencia clínica e investigación”, concluyeron los investigadores. “Los datos a largo plazo demuestran consistentemente la seguridad, eficacia y durabilidad de la cirugía metabólica y bariátrica en el tratamiento de la obesidad clínicamente severa y sus comorbilidades, con la consiguiente disminución de la mortalidad en comparación con los métodos de tratamiento no quirúrgicos”.